Para acompañar el entrante de milhojas de manzana, foie y queso de cabra, hemos elegido 16 Gallets. Un vino joven, fresco y con mucho carácter de una bodega que nos encanta y de la que ya hemos ahbaldo aqui anteriormente: Celler del Roure.
Setze Gallets nace con un formato dinámico y desenfadado, un vino de calidad en Tetra Brik, un concepto diferente para un vino diferente. También podéis encontrarlo en botella.
¿Por qué en Tetra Brik?
La verdad es que para los amantes y románticos del vino puede que les lleve a rechazarlo en un primer momento, pero cabe recordarles que se trata de un vino joven, para todos los días, el envase es más ligero que una botella de cristal, y ocupa menos, aunque la idea es muy novedosa, el mercado necesita madurar un poco este tipo de envase para el vino, quizá sea porque algunos de los vinos que se venden en este formato no cumplen con la calidad mínima, pero si toda regla tiene una excepción, un elemento que sobresale y hace que se pueda cambiar el pensamiento sobre un concepto, 16 Gallets es el primer paso, un vino de Calidad para todos los días, un concepto nuevo en un nuevo envase.
Siguiendo la estela del Cullerot, también de Bodegas Celler del Roure, combinan la naturalidad del vino con un etiquetado sencillo pero muy cuidado.
Es un coupage de variedades autóctonas y típicas de la zona Mediterránea, garnacha tintorera, monastrell, mandó, y merlot.
Es un vino de color rojo rubí con ribetes violáceos muy marcados debidos a su juventud, de capa media. En nariz es afrutado con recuerdos a frutos rojos, a mora y a gominola. En boca es equilibrado, un buen acompañante para entrantes y los platos del día a día.
Es verdad que no tenemos cultura de este tipo de envase para el vino pero, efectivamente, al ser un vino joven lo admite perfectamente siguiendo siempre las normas establecidas.
Bss
La cocina de Mar
http://la-cocina-de-mar.blogspot.com